El paro juvenil ha recibido durante los últimos años toda la atención de las autoridades públicas. Sin embargo, hay un colectivo de población especialmente vulnerable en términos de desempleo y reintegración, el de la población mayor de 45 años. Casi el 40% de los parados mayores lleva buscando empleo más de cuatro años y el 72,1% lo hace desde un año o más.
Al mismo tiempo, a pesar de la recuperación económica, de los 3,7 millones de parados actuales, 1,9 son parados de larga duración (PLD), es decir con más de un año de paro, lo que representa el 51% del total, mientras que la proporción de parados de muy larga duración (PMLD), es decir con más de dos años de paro, es del 37%.
El paro es hoy en ciudades como Madrid claramente “de larga duración y senior”. Ya hay más parados mayores que jóvenes y de larga duración en su mayoría.
¿Qué está fallando?, ¿Qué está funcionando? Indudablemente, las características del mercado laboral post-crisis (flexible, inseguro, digital y,… mal pagado) son una consecuencia de este drama para muchas personas, pero también hay cosas que se pueden hacer. Hay multitud de reflexiones, propuestas y análisis sobre los trabajos del futuro y el futuro de los trabajos, y concretamente sobre las habilidades que será necesario desarrollar para adaptarse al mercado laboral del siglo XXI (21st century skills).
Pero como si se tratara de una profecía auto-anunciada, el foco se centra en cómo educar y capacitar a las nuevas generaciones.
El Ayuntamiento de Madrid lleva tiempo trabajando a través de su Agencia para el Empleo, sobre los parados de larga duración y los mayores de 45 años, con enfoques innovadores que están dando muy buen resultado, pero son iniciativas que exigen muchas horas de formación y presencia física, entre un colectivo (digámoslo claro) algo cansado de recibir formación y con dificultades lógicas de autoestima y motivación.
La Agencia para el Empleo lanzó a Khora Urban Thinkers un doble reto. Explorar otra manera de entrenar a los mayores de 45 años y compartir esta experiencia con el Grupo de Trabajo de Asuntos Sociales de la red EUROCITIES (que agrupa a 140 grandes ciudades europeas en busca de soluciones urbanas innovadoras). Para asumir este reto, nos unimos al Instituto Europeo di Design y su Innovation Lab, organizando tres grupos con 25 personas cada uno (todos ellos parados de larga duración mayores de 45) que fueron entrenados en un corto período de tiempo en forma de piloto, sobre técnicas y habilidades del siglo XXI.
Durante una semana cada grupo pudo participar en talleres sobre resolución de problemas, realidad virtual, design thinking o creatividad. El objetivo fue siempre generar un cambio de mentalidad en la forma en que se aproximan estas personas al nuevo mercado laboral, más optimista aunque inconformista, observando su experiencia y complementándola con otras técnicas disponibles a las que no hay que tener miedo.
Compartimos esta experiencia en un acto en Madrid los días 27 y 28 de septiembre con otras 12 ciudades europeas y con la presencia de la Comisión y el Parlamento Europeos y el Servicio Público de Empleo Estatal, con una extraordinaria acogida. El intercambio de conocimiento y experiencia nos permite afirmar que se debe potenciar una formación para el empleo más pegada a las características del nuevo mercado laboral, en el que la creatividad, el diseño y la innovación sean herramientas clave no sólo para lanzar al mercado start ups de alto contenido tecnológico sino con el objetivo de mejorar la búsqueda de empleo o apoyar al autoempleo de estas personas en claro riesgo de exclusión socio-laboral.